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Hace unos años, estando en la misa de domingo con mis papás y mi hermano, no sé porqué ni de dónde me vinieron de la nada unas increíbles ganas de llorar. Ya no recuerdo bien el momento exacto en que me pasó esto, pero si tengo grabado en la memoria lo que dijo mi madre ante tan curiosa reacción de mi parte: "A lo mejor eres demasiado bueno".

Mucho tiempo después de eso (hace unas 2 semanas para ser exacto) mi hermano dejó de trabajar en el callcenter de Axa. Y me decía que fue para mejor que yo no quedara trabajando ahí, porque la gente que los llamaba era muy prepotente y que yo era "demasiado bueno" como para que me trataran así.

¿Bueno, yo? ¿Hasta qué punto? ¿De qué forma?

Para cantar soy bueno, porque me gusta tanto que ando cantando en todos lados, pero para buscar pega no soy muy bueno (sino, ya tendría trabajo hace rato)... Para engordar soy buenísimo aunque no lo quiera, pero para perder el peso ganado a veces soy bueno y a veces no... Para pelear con mi papá soy tan bueno, como tan malo soy para que dejar de estar enojados... Y así suma y sigue.

A veces no me siento para nada bueno, tanto porque las cosas no resultan como no logro que resulten... Espero que las cosas cambien con el tiempo y no termine siendo un bueno para nada.