Chile con Todos

La última entrada del blog de este año estará cargada a los clichés.

El primero de ellos es el típico:  el año se pasó rapidísimo. Y esto es porque estamos en una sociedad en la que recibimos todo en una forma tan fácil y casi inmediata (noticias, tecnología y entretención, por dar ejemplos) que cada día de nuestra vida pasa a un ritmo tan veloz que ya casi no nos damos cuenta...

Parece que fuera ayer (2ª frase cliché) cuando llegamos a la casa de mi abuela materna en Tomé, para recibir junto a mis familiares del sur la llegada de este año, que luego de 366 días ha dejado hartas cosas para anotar: volver a la vida laboral, la muerte de un par de buenos amigos, decepcionarme de las actitudes de algunos, darme cuenta de cuánta gente me quiere y que quiere lo mejor para mí, etc. (3ª frase cliche, ya que el "etc." se usa cuando se tiene mucho por decir o se olvidó la mitad XD).

En resumen, debo decir que 2008 fue un buen año... Y si este año fue bueno, espero con ansias que 2009 sea igual o mejor para mí y todos los que me rodean: familia, amigos, conocidos, los que me caen bien, los que no tanto, para los que les importo y para los que no... No tengo rencor ni envidia ni le deseo el mal a nadie (me falta desear la paz mundial y soy Miss Universo XD).

Y aquí está mi último cliché (que no deja de ser verdad por ser cliché) : Les deseo de corazón a todos ustedes un feliz, próspero y maravilloso 2009. Que todas sus expectativas se cumplan, sus sueños se realicen y que la salud y bienestar los acompañe siempre.

PD:




Un año más - MECANO

En la puerta del sol
Como el año que fue
Otra vez el champagne y la uvas
Y el alquitrán, de alfombra están

Los petardos que borran sonidos de ayer
Y alcaloran el ánimo
Para aceptar que ya pasó uno más

Y en el reloj de antaño
Como de año en año
Cinco minutos más para la cuenta atrás

Hacemos el balance de lo bueno y malo
Cinco minutos antes de la cuenta atrás

Marineros, soldados, solteros, casados, amantes, andantes
Y alguno que otro cura despistao
Entre gritos y pitos los españolitos
Enormes, bajitos hacemos por una vez algo a la vez

Y en el reloj de antaño
Como de año en año
Cinco minutos más para la cuenta atrás

Hacemos el balance de lo bueno y malo
Cinco minutos antes de la cuenta atrás

Y aunque para las uvas hay algunos nuevos
A los que ya no están echaremos de menos
Y a ver si espabilamos los que estamos vivos
Y en el año que viene nos reimos

1, 2, 3 y 4 y empieza otra vez
Que la quinta es la una y la sexta es la dos
Y asi el siete es tres

Y decimos adios
Y pedimos a Dios
Que en el año que viene a ver si en vez de un millon
Pueden ser dos

En la puerta del sol
Como el año que fue
Otra vez el champagne y las uvas
Y el alquitrán, de alfombra están.



Calurosa Navidad... Arriba el sol quemando nuestras calles...
Calurosa Navidad... Es el sudor que moja nuestros trajes...
Aquí no nieva nunca...
Aquí no hay noches blancas...
No hay guerras de nieve, pero hay...
Bombas de aguaaaaaa...

Cuando la gente que hizo 31 Minutos ideó el Especial de Navidad, no pudieron haberle dado mejor en el clavo al crear esta canción, ya que refleja en su totalidad a la navidad chilena.

Por nombrar algunos ejemplos:

Aquí no nieva nunca, aquí no hay noches blancas.
Es la realidad de los que vivimos esta época del año en pleno verano: la blanca navidad es sólo cosa de canciones, películas o imágenes de otras partes del mundo donde sí reciben nieve, mientras algunos de nosotros soñábamos que alguna vez se diera el milagro de la nieve en Navidad... ("espérate sentaíto" diría mi vieja).

Acá, con suerte queda un resto en (literalmente) alguna punta de la cordillera y lo más cercano a tener un clima diferente al sol el día de navidad fue una vez que llovió a cántaros un 25 de diciembre de hace ya varios años.

Arriba el sol, quemando nuestras calles.
Agreguémosle que el clima veraniego tampoco contribuye a hacer más placentera nuestra labor de "viejos pascueros", sobretodo cuando los regalos los compras en una fecha cercana a la de la festividad e incluso el mismo día. Nos faltan los Hug... digo, los que dejan todo para última hora...

En fin...

Independiente de todo aquello. Ya ha pasado la tarde y llega la Nochebuena, donde se cuentan los minutos para que a las 12 recibamos no sólo los regalos que nos hacemos entre familiares y amigos... Cristo nos entrega el regalo de nacer en nuestro hogar y nuestro corazón.

Mis amigas y amigos: Les deseo a todos ustedes una muy Feliz Navidad. Espero que puedan pasar estas fiestas rodeados de los que les quieren y sus corazones se llenen de la dicha de esta celebración.

Son mis sinceros deseos :)

PD: Y si me tienen un regalito, el viernes tengo libre... Así que nos juntamos y me lo entregan XD!

(Gracias a Angelillars por darme tema para el blog)...

Con el fin de año a la vuelta de la esquina, podría decirse que ya es típico (casi una obligación para algunos) organizarse y realizar un clásico de estas fechas: el juego del "amigo secreto". Y lo que en un principio puede ser una buena idea, sugerida con las mejores intenciones para poder compartir con la gente con las que nos relacionamos, para varios termina transformándose en un verdadero cacho: unos nunca saben sabemos qué regalar, otros deben poner la mejor cara sea cual sea el regalo y en general todos esperan esperamos a que el sorteo sea el mejor (es decir, que nuestro amigo secreto realmente sea "amigui" y no termine siendo "enemigui"). Definitivamente es un reflejo fiel de cierta representación sobre el tema que me ha tocado presenciar (los de Eje me entenderán).

Los primeros recuerdos que tengo de haber jugado al amigo secreto son de la época del colegio, donde era infaltable en las convivencias de fin de semestre o fin de año:

- En 4º o 5º básico (el primero que viene a mi memoria al menos) me quedaron debiendo el regalo o creo que me dieron en compensación unas bolitas (es decir, fue tan "significativo" para mí que ya ni me acuerdo ¬¬).

- En 8º básico creo que hicimos 1 amigo secreto por semestre y ahí me fue algo mejor: en el primero le toqué como amigo secreto a mi profesora jefe, la que me regaló un tazón que tenía forma de la cara de Tribilín (regalo que todavía tengo en mi casa) y en el segundo me regalaron una agenda, aunque después mi compañero dijo que se equivocó y que era el regalo para otra persona y entre ambos me lo trataron de cambiar... sin éxito.

- En 4º medio jugamos al amigo secreto para un retiro que hicimos en septiembre del 2000 en Quilpué y donde los regalos los teníamos que hacer con lo que tuviéramos en ese momento. A mí me había tocado otra persona, pero como todo el curso sabía que me gustaba una compañera y que anduve detrás de ella prácticamente toda la media, me cambiaron el papel para que me tocara ella y le entregara mi regalo. Truchamente arreglado. Pero lo único que conseguí, además de que todo mi curso me columpiara el resto del año, fue que siguiera siendo sólo mi amiga (saludos para ella, que hoy es una mujer felizmente casada).

Sin contar las muchas veces que hemos jugado en Eje, creo que la última vez que participé de un amigo secreto fue hace un par de años, con gente de DDR.cl. Y son dos cosas las que más recuerdo: 1. Que llevé la expresión de "amigo secreto" a su máxima expresión porque no conocía a quien me había tocado (XD!) y 2. Que la persona a quien le toqué como amigo secreto (Manuel, AKA Carucha) ya no está con nosotros... En fin...U_U

No sé porqué la mayoría de los que participan participamos de un amigo secreto termina terminamos jugando de nuevo, independiente si el resultado es de dulce o de agraz. Supongo que si nos sirve para pasar un buen momento, para reirnos con el otro y no del otro y para crear o reforzar lazos, bienvenido sea.

PD: Como Dato Rossa en relación a la imagen, SI existe la página del Sr. X:
http://www.mrxswebpage.com/


 

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