Chile con Todos

Caruchín:

Ojalá pudieras leer estas líneas que estoy escribiendo ahora, pero sé que de alguna u otra forma estas palabras llegarán a tus ojos o tus oidos en el lugar donde estés.

No recuerdo bien cómo ni cuándo te conocí. Sólo sé que desde que se formó entre nosotros un lazo de amistad supe que eras una gran persona, con una calidad humana a flor de piel. A lo mejor no estaba tan ligado a tu círculo más cercano de amigos, pero eso nunca fue impedimento para que compartiéramos buenos momentos.

Si bien en el último tiempo no habíamos tenido la oportunidad de juntarnos, siempre que pudimos cruzar alguna palabra, el cariño y la amistad estaban intactos. Porque con un tipo como tú, de esos que son buenos "de adentro", siempre se podía contar, tanto para pasar un rato ameno como simplemente para hablar de la vida misma o de la última talla de turno. Siempre había tiempo... Hasta ayer...

Cuando vi una foto tuya en el fotolog de Pablo (Jin) y leí que habías fallecido, al principio no me la creía. Quería pensar que era una broma de mal gusto y que putearía un millón de veces al autor de ese macabro chiste. Pero seguía leyendo lo mismo en todos lados, la noticia se había esparcido como reguero de pólvora y al igual que yo, nadie lo podía creer. Fue ahí cuando recién reaccioné de que todo era verdad.

Las lágrimas brotaron solas, pero con ellas vino a mi mente un recuerdo de ti: cuando le quitaste la entrada a un otaku para entrar a un evento en la Usach (y que bautizamos esa acción como "hacer un Carucha"...XD). Luego nos acordábamos con los demás de varias anécdotas tuyas: el CSM, el Yiiiiiiiiiiisus, cuando saltaste al montoncito y pasaste de largo, entre otras... Incluso al verte en el féretro, parecía extrañamente que esbozabas una sonrisa, como queriendo decir "me alegra que estén aquí, chicos... gracias por venir". Todo eso era señal de que, aun cuando nos sentíamos tristes, quisiste que nos quedáramos con lo bueno que nos pasó al conocerte, al compartir contigo o simplemente porque estabas ahí... Dicen que los amigos son la familia que uno escoge, y si perder a un familiar es doloroso, también lo es ver partir de este mundo a un amigo. Sobretodo a uno como tú, Caruchín.

Pero sólo te perdimos de vista, viejo... Para mí y para todos los que alguna vez tuvimos la gran suerte de que nuestra vida coincidiera con la tuya, tu presencia sigue estando aquí. Tu risa, tu estilo de mafioso, tu pasión por el Guitar Hero y tu amistad a toda prueba nos sigue acompañando... Porque en todas las muestras de cariño de la gente hacia ti, comprueba que tocaste muchos corazones y que en lo terrenal perdimos un amigo, pero en lo celestial ganamos un ángel caruchón y gozador, que ahora nos protege y cuyo recuerdo estará en nosotros para siempre... Porque como muchos han dicho, "el legado de Carucha NUNCA morirá".

Ojalá pueda algún día ser la mitad de lo gran persona que eres...
Un abrazo enorme.

Tu amigo, Hoogueeto... :)

PD: Espéranos, que algún día te alcanzaremos...

1 aplausos de la galería:

  1. Anónimo dijo...

    Pues sí. Para muchos de nosotros, Carucha, fue quien nos ayudó a integrarnos a DDR.cl. Era la persona que siempre tenía una sonrisa y una palabra de apoyo para ti. Un tipo demasiado especial, que sé que dejará marcas en el corazón de todos quienes tuvieron la oportunidad -por muy fugaz que esta fuese- de haber compartido al menos, un par de palabras con él.

    Ahora sólo nos queda seguir, apoyar y visitar de vez en cuando a la familia del Padre de la Logia Fanta Naranja, y hacerle sentir a quienes aun nos acompañan con el dolor de la pérdida, que no están solos. Me gustaria participar en todo ello, pero lamentablemente, desde Antofagasta no puedo hacer mucho.

    Adiós, Carucha. No negaré la perfección del Diseño de Dios con tu partida. Pero me regocijaré de los buenos momentos que compartí contigo.

    "Capiche"

    Au revoir.-  


 

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